miércoles, 22 de diciembre de 2010

Running. La Película. 1979.

Son infinidad las veces que desde hace años me he acordado de esta película.
Hace mucho que la pude ver en televisión y nunca más he vuelto a saber de ella. Alguna vez había buscado en internet alguna reseña. Principalmente a través de la Biografía de su protagonista Michael Douglas, sobradamente conocido. Pero, incluso así en algunos casos ni la mencionan.
El caso es que esta semana de nuevo he sentido la curiosidad de indagar y he encontrado en You Tube algún pequeño trailer.
Es una película que me llegó, sencilla y posiblemente sensiblona. Pero muchas veces la he recordado y no me importaría volver a verla o hacerme con una copia.
El argumento es sencillo y creo recordar que era más o menos este:
Un padre de dos hijas, en trámites de divorcio, en paro, con problemas para encontrar trabajo y con un pasado como atleta. Es decir, un perdedor en toda regla.
El buen hombre cada día se levanta con la intención de salir adelante, su hija mayor se avergüenza de él y lo único con lo que disfruta es con la libertad de correr. 
Un buen día decide retomar su carrera deportiva, entrena como nunca, se prepara para el maratón Olímpico de Montreal (creo) y se presenta a los trials americanos. A pesar de ser uno de los favoritos y de comenzar bien la prueba, una vez más, se atenaza en el momento de la verdad y fracasa quedando fuera de los seleccionados. Otra nueva decepción.
Pero resulta que pocas semanas antes, uno de los seleccionados se lesiona y aunque con dudas es convocado en su lugar.
Llega el día de la prueba, se toma la salida y al poco nuestro amigo se destaca con su correr fluido, como si estuviera corriendo por las calles de su barrio así durante un buen puñado de kms. Llueve y en un momento dado a la vez que toma una curva gira la cabeza para medir la distancia a sus perseguidores. Fatal error que le lleva al suelo donde queda magullado y una vez más vencido.
Los corredores pasan y llegan al estadio olimpico. Su familia se desespera delante del televisor y la vida sigue, cuando de repente conectan para decir que un loco corredor sigue en carrera horas después desafiando al tráfico de la ciudad, entre bandazos con el único objetivo de llegar. 
Las televisiones recuperan la señal, los atletas salen a buscarle, el público le jalea hasta finalmente llegar a la meta.
Su mujer le espera, sus hijos lloran y la película se acaba.
Ya os he dicho que es sensiblona, muy americana probablemente. Pero a mi me gustó y evidentemente, como podeis ver me dejo un gran recuerdo.
Os dejo este enlace donde podeis haceros una idea:

3 comentarios:

fernan130 dijo...

A mí me parece que la entrada en la Goi de elhermanodalex es una copia del final de esta película...

Mildolores dijo...

Gracias por revelarnos su existencia.

ElHermanoDAlex dijo...

Si ya me había apetecido verla después de ese pequeño avance que has puesto en el link, después de la entrada de Fernan130 me temo que me será inevitable tener que hacerme con una copia. Al igual que te dice Mildolores, gracias por revelarnos su existencia.