martes, 29 de enero de 2013

Trilogía 42K.

Ya están decididos los objetivos para este 2013. 
Después de mis escarceos y mis incursiones en el mundo ultratrail de los pasados años con distintos resultados en Beasain, Navacerrada y Segovia este año básicamente he decidido volver a mi prueba predilecta: el maratón de montaña.
Para ello he escogido tres pruebas en las que espero estar de una u otra forma:
- Maratón de Zegama-Aizkorri (mayo).
- Maratón Alpino Madrileño (junio).
- Maratón DesafíoSomiedo (septiembre).
Como corredor o como animador en cada caso, si las circunstancias no me son propicias. Porque sinceramente, subir los últimos metros hacia la cima del Aizkorri con un dorsal en el pecho son una experiencia inolvidable, pero vivirla cámara en mano y vitoreando a los valientes, por ejemplo, es realmente emocionante. Ambas opciones merecen la pena ser vividas.
Como eventos especiales, también haré la ruta anual (Cut) que preparamos Los Locos del Cerro y que este año nos ha de llevar por la Senda del Genaro en abril y es posible que acuda en julio con muchos compañeros a los Cavalls de Vent no competitivos de la mano de nuestro gran amigo Ppong.
Finalmente, me dejo en la recámara la opción de volver a Beasain en julio (a costa de Cavalls por desgracia), si el alma se me retuerce clamando vendetta por esa cuenta pendiente que tengo con la G2H desde hace un par de años.
No sé si es mucho o poco trajín. Dependerá de con quien se compare. En cualquier caso este año mis ambiciones van por el camino de la intensidad y no por el de la resistencia.
Ahora, sólo queda esperar que las fuerzas y la suerte me acompañen. Os contaré.

martes, 8 de enero de 2013

¡Roma Vincit!.

Y de entre la bruma llegan los nuevos días. El futuro, ilusiones, retos y desafíos. Tras el descanso calzarse  para retomar el camino y afrontar la próxima batalla.
No podemos rendirnos, la vida no te deja a poco que la mires. Te muestra. Se muestra. Te llama y te toma.
Así que no merece la pena resistirse. Es apasionante observarla.
Calzado, parapetado en su gastada coraza, el veterano legionario se pone de nuevo en marcha.
¡Roma Vincit!.