martes, 21 de junio de 2011

Ultrareflexiones 6,30.

Apenas 4 días para la cita más difícil de la temporada es momento de hacer las últimas reflexiones previas.
Llego en buenas condiciones. El MAM no me ha dejado a priori excesivas secuelas. Me he encontrado bien en las salidas de estos días. Quizá un poco ahogado si forzaba demasiado en algún momento pero recuperando bien y con sensación de solided. De fondo y capacidad de prolongar el esfuerzo en ritmo continuo o en alternancia de ritmos.
Estos últimos días he tenido ocasión de coincidir con algunos compañeros y charlar con otros por teléfono. Eso me ha hecho percibir un cierto handicap de cara a la prueba del sábado. Por un lado estan los que me conocen desde hace tiempo y saben de mi veteranía en maratones de montaña y por otro los que han compartido algún entrenamiento o carrera conmigo estas últimas semanas. La mayoría de ellos no conciben que deba tener problemas para superar el desafío. Yo descofío.
Pero mi mente no parte desde esa premisa. Yo afronto esta prueba desde la más profunda humildad ya que hasta la fecha no he demostrado que sea capaz de superarla, más si cabe desde el fiasco del pasado año en la G2H. Me siento como un novato y albergo todas las dudas e incertidumbres propias de tal.
Si el pasado año partí confiado en mi capacidad y el terreno se encargó de hacerme doblar las rodillas, en esta ocasión no espero nada y salgo a por todo. Ese no será el error.
Del mismo modo en esta ocasión creo que seré fiel a mi mismo, a mi estilo, seré Prisillas. No por ir rápido, sino por hacer mi carrera como tantas y tantas veces con sus momentos de euforia y sufrimiento. Haciendo amigos y compartiendo camino.
Disfrutando de la Doble A y reencontrándome. Reconociendome en la alegría o en el fracaso. En la fuerza y en la fatiga. Pero habiéndolo intentado una vez más. 
No tengo nada que perder y puedo hallar mucho.
El sábado a las 6,30 buscaremos las respuestas.

miércoles, 15 de junio de 2011

Ultrareflexiones 5.56

Creo que me merecía una alegría.
Tenía ilusiones en esta carrera. Condicionada por la cita sobre 110 km que me aguarda dentro de 10 días afrontaba el Maratón Alpino entrenado pero necesariamente prudente. Confiaba hacer una buena carrera. Mantener unas buenas sensaciones durante la misma y terminar en un tiempo respetable. Aquí el Track
Desde esa premisa he de decir que al final fue una victoria a los puntos quizá. Unos minutos de flaqueza sobre el km 34 hicieron que no pudiera ser un KO y sentirme dominador en todo momento como me hubiera gustado.
El entrenamiento desarrollado durante estas últimas semanas me daban una base para hacer un buen papel en carrera. Para este kilometraje y desnivel posiblemente me hayan faltado entrenos intensos y más cortos que me dotaran de mayor explosividad. Más agónicos y rápidos. Pero ahora tocaba ir a ritmos lentos. 
El problema, el peligro, era que se me fuera de las manos y forzara demasiado a 15 días del GTP dejando un buen puñado de fuerzas que luego echara en falta.
Creo que en parte conseguí controlarme. Digo en parte porque he de reconocer que el tiempo final, poco por debajo de las 6 horas, estuvo por encima de mis expectativas (6h15 en el mejor de los casos). Durante la carrera dosifiqué relativamente bien, pero la presencia de mi compañero Alberto siempre unos metros por delante en las bajadas me "obligaba" a recortar en las subidas ya que me apetecía compartir con él la mayor parte de la carrera posible.
Y, no puedo considerarme completamente satisfecho debido a una pequeña crisis de 10' que tuve en el último repecho previo a Bola. Finalmente con la ayuda de una buena barrita energética lo superé, pero deja un poso de incertidumbre. Sin eso hubiera llegado con Alberto a Bola y es posible que hubieramos compartido la bajada final (si me hubiera querido esperar un poco) cerrando una edición perfecta.
Otra cosa a valorar son las tobilleras compresport. Creo que van bien, pero en subidas fuertes me agobia un poco la presión en los gemelos y es cierto que carga un poco los cuadriceps ya que por primera vez en mucho tiempo noté algún amago de sobrecarga. He decidido llevarlos bajados en las subidas principales y ajustados en el terreno llano y bajadas.
En cuanto a la carrera en sí demasiado calor para mi gusto. Buen ritmo de paso en los controles. Subida espectacular a Cabezas como siempre disfrutando del último tramo de pedrera como un colegial cuando un rato antes iba más atascado. Impecable marcaje del recorrido, impresionante simpatía y dedicación de los voluntarios. Si tuviera un poquito de público más entregado y numeroso en las cimas, menos dominguero (sin matices despectivos), ganaría un plus. Pero claro esto yo solo lo he visto en Euskadi donde se admira a los corricolaris.
Os dejo el enlace de la clasificación y el de la web del Club Tierratragamé donde han colgado fotos y videos.
Las fotos de esta entrada estan tomadas de dichos enlaces menos la de meta que me hizo mi hijo y la de salida que es de Alberto.
Ahora toca descansar, motivarse y confiar ante el próximo desafío extremo.

jueves, 9 de junio de 2011

Primer Asalto: MAM

Pues todo llega y este domingo 12 afronto el Maratón Alpino Madrileño. El MAM, mi MAM.
Y durante esta semana he ido preparando mi cuerpo para el esfuerzo que se avecina, descansando con entrenamientos suaves, pocos kilómetros y alimentándome a conciencia por supuesto.
Hoy he disfrutado de la última salida. Ese pequeño puñado de km habituales a las grandes citas donde se saborea cada zancada, leve, ligera, plástica. Donde la cabeza toma el relevo de los músculos visionando el futuro y visualizando recuerdos del pasado.
Sentir el frescor de las aguas del arroyo navalmedio en los primeros pasos camino del puerto. Los jadeos en la subida bajo el telesilla camino de Bola, el viento en el collado, las primeras zancadas torpes en la bajada hacia la Loma del Noruego repleta de piedras emboscadas. Avituallamiento en Cotos. Sendero por el pinar hacia Citores, primeros canchales, Peñalara majestuosa. Pista en Dos hermanas hacia Cotos, primeras miradas hacia tubos. Preciosas praderas, barro y agua para alcanzar el comienzo de la mítica ascensión a Cabezas. Momento de sujetar las pulsaciones, regueros transparentes y puros. Piedra y desnivel, sudor y esfuerzo para ganar cada metro de ascensión. Canchal final donde tiramos de manos para ascender y cumbre. Primeros metros delicados de bajada. Comienzo de senda, Viejas piedras enterradas en el suelo que se levantan a nuestro paso,  o no, es el cansancio que aumenta la torpeza. La Bola del mundo que se aleja en vez de acercarse. Por fin llega y su vertiginoso descenso. Pánico en los tendones de tobillos. Último avituallamiento y para abajo. Raices traicioneras, de nuevo el arroyo pero ahora agradecido. Malditos toboganes. Golpe de calor entre los helechos a orillas del embalse. Fondo de magafonía que anuncia el final. Último descenso. Calle de Cercedilla y Meta.
Satisfación, cansancio, barro, sudor y rasguños. Busco una sombra donde sentarme y descansar. Bebo un trago de algo fresco y sonrio. Una vez más espero haber sobrevivido.
El tiempo será lo de menos. 
Lo demás más o menos así. Eso sí. Rodeado de grandes amigos, enormes deportistas, atravesando bellos lugares, disfrutando de maravillosas vistas si el cielo está despejado y disfrutando de correr por la naturaleza. Eso que es tan simple y que encabeza este Blog.