viernes, 6 de noviembre de 2009

Desbrozando.

Pues son ya unos meses desbrozando en este espacio virtual llamado Blog parte de mi.
En ocasiones intimista, reflexivo o de verso fácil. Otras vil reflejo de actualidad social o deportiva.
Un espacio que no sé si interesa y, que irónicamente es público.
Nadie me lo pidió. Más bien nació como una propia demanda interna.
Imagino que en la mayoría de los casos no es más que esto. Una necesidad interna más o menos imperiosa de dar rienda suelta a nuestros pensamientos, sueños o miedos.
Pero a mi. particularmente me hace feliz.
Actualmente y gracias a un buen amigo estoy leyendo un libro que seguro algunos conocereis: Cita con la cumbre (Juanjo San Sebastián, Editorial Desnivel).
Y me está encantando.
Sencillo en su concepción y desarrollo, algo que no dejaría de ser lo que seguro hacen muchos "bloggueros". Contar a los demás algo que nos apasiona con emoción , sin datos abrumadores ni parrafadas grandilocuentes . Encuentro, experiencia y desenlace de un puñado de aventuras vividas.
Para nosotros y en nuestro caso el atletismo.
Retos, preparación, selección de objetivos, lesiones, éxitos y fracasos en un carrusel incesante.
Algo que tantas veces nos decimos "esto no interesa a nadie" ¿o si interesa?.
Porque quiero pensar que cuando uno describe con emoción sus vivencias, el desarrollo de las mismas es en si una aventura. Como acto de vida que implica. no hacen falta situaciones extremas para captar nuestra atención.
Estoy convencido de que relatar con pasión este impulso que nos mueve a realizar cualquier desafio, a no quedarnos quietos, es capaz de interesarnos.
Hoy día nos mostramos poco, fabricamos un caparazón a base de rutina, convencionalismos y falsa suficiencia.
Pero el ser humano es corazón también y ese no entiende de formalismos.
¿Acaso no es un mago quien lo consigue?. Magia auténtica.
Sentir para ser capaz de para hacer sentir.
En cualquiera de sus formas. Escrita, visual, auditiva, táctil, olfativa, gustativa.... cocineros, músicos, cineastas... y nosotros mismos ¿porqué no?.
Cada vez que miramos sin mezquindaz y estamos dispuestos a describir para quien nos quiera escuchar, lo que vemos y lo que nos hace sentir.

6 comentarios:

Manuel Tintoré Maluquer dijo...

Buena entrada, me ha encantado lerla antes de irme a dormir; saludos, te sigo leyendo.

fernan130 dijo...

Da igual la faceta de la vida o de la actividad en que nos movemos, al final, terminamos teniendo las mismas sensaciones, vivencias, desánimos, pasiones,...; por eso, suele gustarnos en general leer a quienes con mayor o menor acierto llegan a describir lo que sentimos y muchas veces no somos capaces de describir. En definitiva nos gusta vernos reflejados en los relatos de otros. A cualquiera que ha sentido alguna vez el desánimo y la pesadumbre ante un momento duro, no puede evitar un ligero escalofrío de emoción ante el relato épico de su superación. Da igual si se trata de una hazaña hecha a 8.000 metros de altura o sufriendo un bache en una media maratón de montaña. Los sentimientos de todos nosotros son parejos aunque los retos sean desiguales. Por eso nos gustan tanto este tipos de relatos, porque en definitiva, formamos parte de ellos.

Fer dijo...

Me ha encantado.
Slds

Mikel Vm dijo...

¡¡¡ GRACIAS !!!

Prisillas dijo...

A vosotros las gracias por estar ahí, visibles u ocultos.
Como en las pelis de terror, aunque esta no lo sea, la presencia no tiene que ser necesariamente física pra que nos provoque emociones.
Saludos.

Luigi dijo...

Yo creo que los corredores somos unos grandes románticos, sin ninguna duda. Y por mucha exigencia o dureza física que le atribuyamos, este deporte tiene grandes dosis de componente mental. Inaprensible, inefable, inmaterial. Vaya, que muchos días y muchos momentos vivimos en mundos que en parte no existen, como aquellos de los clásicos griegos en que al leerlos nos sentimos partícipes. Cuantos más blogs de compañeros leo, más se me refuerza esta idea.

Saludos