viernes, 8 de agosto de 2014

UTDS DesafiOSOmiedo. Objetivo logrado.

Esta Ultra Trail DesafiOSOmiedo ha sido sin duda el reto de la temporada. 
Estamos ante una gran carrera. Un circuito duro y exigente. Un entorno precioso. Unas gentes volcadas mayoritariamente con el evento. Una organización preocupada en hacer las cosas bien y unos voluntarios totalmente entregados al servicio del corredor.
Con todo esto, personalmente no cabe sino poner un sobresaliente a esta prueba y declararla como totalmente recomendable. 
Dentro del circuito hay trayectos donde cada mirada sería una foto para el recuerdo. Peñas, prados, teitos, lagunas... en sucesión de montañas y valles pequeños y grandes. Rincones abruptos y llanuras apacibles.
A mi, desde luego me ha encantado. Y aunque conocía algo del recorrido, no ha dejado de sorprenderme en  muchos de sus tramos.
En lo personal realmente contento. Es la ultra en la que más he disfrutado y en la que en mejores condiciones he llegado al final. Durante la misma fui concentrado pero totalmente relajado (salvo una de las ultimas bajadas con un par de caidas). Sin duda alguna creo que he hecho una buena carrera. Con el clásico "só y arre" en la mente para controlarme en la euforia y activarme ante la cansina rutina.
Cuando llegaba al km 30, primer punto de control de chip y avituallamiento serio me cantaron el puesto 145 de la carrera. Terminé el 103. Adelanté muchos puestos subiendo casi siempre. Perdí unos cuantos en las bajadas. Especialmente en la pronunciada de los Bígaros donde tuve que parar un par de veces para descansar las rodillas y las posteriores a la tormenta que hizo que el terreno se volviera resbaladizo y peligroso. En estas circunstancias me vuelvo realmente torpe, conservador y pienso que mejor perder 20' que la carrera en una mala caida. Luego en meta esos 20' pesan. Pero la decisión es correcta.
Tan contento terminé que empiezo a pensar que esto de las ultras igual no me es tan esquivo. Que igual voy cogiendo el tiento a estas pruebas. Eso sí, tengo que seleccionar en la medida de lo posible los perfiles e intentar evitar aquellos de bajadas más pendientes. Si encima se mezclan con lluvia... no me va nada bien. 
El paso de los años me va pasando factura y aunque mis cuadriceps son fuertes y musculados las rodillas comienzan a sufrir de más. Tengo que ser prudente. Todo en función del porcentaje de la pendiente unicamente.
Para mi memoria quedan esos pasos por el Cornón, el cresteo por los Bígaros con esa pendiente de bajada que era una ostiagorri al cuadrado.
Ha sido un fin de semana redondo en compañía de mi familia y mis amigos Los Locos del Cerro con una numerosa representación en carrera y animando. Cada vez corren más y mejor. Cada vez me dejan más atrás. El mérito ya es casi resistir y aguantar con gente de su nivel.
En fin, quedan unos recuerdos realmente imborrables y una carrera que ocupará un lugar importante en mi memoria. Y, fundamentalmente una mayor convicción de que haciendo las cosas bien, con cabeza durante la prueba, ¿por que no? puedo llegar a disfrutar plenamente de estos retos.
Eso sí. Uno al año que hace menos daño.